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miércoles, 11 de enero de 2012

:)

Cuando éramos pequeños lo que queríamos era crecer. A menudo jugábamos a las casitas o a las mamás, jugábamos a ser futbolista o espía o cualquier cosa pensando en que de mayores sería de verdad. Pensamos que va a ser como nuestros juegos e incluso piensas que va a ser parecido, pero cuando realmente te vas haciendo mayor te das cuenta de que cada vez esos juegos no tienen nada que ver con al realidad. Eres mas consciente de que no vas a ser un espía o una cantante, futbolista o veterinaria. La vida da muchas vueltas y si consigues ser lo que querías de pequeño te das cuenta de que en realidad no estaba tan bien como pensabas.
A menudo queremos ser mayores. ¿Quién no se ha vestido con la ropa de su madre? ¿Quién no se ha puesto unos tacones o maquillado un poco esperando a tener la edad suficiente para poder hacerlo en condiciones? Cuando por fin puedes hacerlo descubres que los tacones duelen cuando llevamos rato con ellos, y que el maquillaje es un palo tener que quitártelo después. Y no entraré en mas temas, aunque tengo bastantes. El consejo que doy es que hay que vivir el día a día sin procurarnos que pasará mañana, ya tendremos la edad para hacer las cosas que queremos, pero de momento disfrutar de las cosas que ahora mismo podemos hacer, porque solo las podríamos hacer una vez.

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