Cierro los
ojos. Alzo las manos moviendo el cuerpo al ritmo de la música que
suena más alto que todo lo que hay al rededor. Por un momento me
olvido de todo lo que pasa, de todos mis pensamientos, mis problemas,
me olvido de hasta quien soy, solo se que no puedo dejar de bailar.
Hay más cuerpos que se unen al mio que se pegan a mí. Nuestros
cuerpos palpitan con el sonido que nos rodea. No podemos dejar de
movernos. Río. Levanto la cabeza para sonreír a las luces que se
mueven frenéticas sobre mi cabeza. Cierro los ojos no puedo dejar de
moverme.
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